Hace un par de años, el rodillo del Partido Popular en les Corts, tiró para atrás la propuesta de EUPV de llevar ciclos formativos, la antigua Formación Profesional (F.P.) al centro de Secundaria de Jérica-Viver. Esta propuesta, nacida después de un estudio riguroso por parte de la dirección del centro, era una apuesta realista e ilusionante para enriquecer la oferta educativa del centro y dar soluciones profesionales a los jóvenes de la zona. En los últimos meses, y lo que te rondaré morena, el Partido Popular ha comenzado su reforma educativa con la implementación en toda la comarca de la nueva F.P., siglas del término FALTA DE PAGO. Ya desde hace tiempo que muchas empresas, autónomos y comercios de la zona sufren las directrices de la nueva F.P. del Partido Popular, lo que ha llevado a las más expuestas económicamente hablando al cierre de las mismas. Con la llegada del P.P. a la Mancomunidad, muchos ciudadanos de la comarca en paro a los que se les había prometido entrar a trabajar en la entidad y que, en último término, habían protagonizado los vuelcos electorales en pueblos como Castellnovo, Sot, Geldo o Chóvar, se han encontrado con el bloqueo económico originado fundamentalmente en la falta total de liquidez derivada de la F.P. popular: deuda de la Consellería de Bienestar social desde 2009 con la entidad, deuda municipal de Altura (35 % de la población total) de los últimos cuatro años, etc....
En los últimos días, la noticia de que en Segorbe las farmacias iban a cobrar a los usuarios corrió como la pólvora si bien es cierto que la Conselleria acudió con 60 de los 500 millones de euros adeudados a tapar la boca de los establecimientos unos días antes de las elecciones. Una situación muy grave porque el cierre de una farmacia, sobre todo las más pequeñas, supone la supresión de un servicio ciudadano muy necesario en nuestros pueblos más deshabitados.
La guinda de esta situación, sin duda es Altura. A día de hoy, las instalaciones municipales del polideportivo carecen de suministro eléctrico. La empresa ha decidido el corte del mismo por impago del consistorio. Un impago a añadir a la deuda con la Mancomunidad, a los retrasos a los trabajadores, a proveedores, etcétera. El PP ha obtenido una victoria electoral histórica en Altura, aunque bajando unos pequeños votos, su distancia con el siguiente partido es enorme. La capacidad de los alturanos para el sufrimiento propio parece no tener límite, tal vez la falta de confianza en otras opciones políticas ha podido decantar esta victoria, pero viendo por ejemplo, la gestión que EU y PSOE llevan en otros municipios de la zona cuesta entender este terraplén por el que parece caer desde hace años. A nadie de la comarca le gusta ver sufrir a ningún pueblo, los pequeños por su situación de debilidad, pero los grandes por su capacidad de arrastre, por los daños colaterales que pueden ocasionar al resto del tejido social de la comarca. Un ejemplo de esto último es Segorbe, su hundimiento económico no ha sido gratuíto para el resto de municipios. Los mostradores de los ayuntamientos de la comarca se han llenado en los últimos años de parados que tenían su empleo en Segorbe. Empresas de otros municipios que tenían su base de actividad en la ciudad se han hundido sin remisión, y la situación de las empresas y autónomos locales no es mucho mejor. Pese a que el Sr. Calvo vende la moto de que las obras públicas se reparten entre las empresas segorbinas, lo cierto es que gran parte del plan E, el plan Confianza, las obras del nuevo Hotel, etcétera, han caido en manos de empresas de fuera no sólo de Segorbe, sino de la comarca, con lo que el esperado efecto positivo en el empleo que se esperaba de estas inversiones, ha quedano en nada. Valga otra vez como ejemplo Altura, la mayoría de cuyas inversiones de estos planes, se han transformado en edificios sin uso, Casilla de los Camineros, Tanatorio, Centro Juvenil,...convirtiéndose en equipamientos que pese a tener un fin plenamente definido, no están en estos momentos prestando el servicio para el cual se construyeron o se equiparon. El porqué de esta situación está, como se ha dicho en la F.P. del Partido Popular, una F.P. que como un cáncer se extiende a la misma velocidad que los éxitos electorales de la formación de derechas.
